lunes, 3 de agosto de 2009
sábado, 25 de julio de 2009
Samba em Prelúdio
Porque sem você não sei nem chorar
Sou chama sem luz, jardim sem luar
Luar sem amor, amor sem se dar
Eu sem você sou só desamor
Um barco sem mar, um campo sem flor
Tristeza que vai, tristeza que vem
Sem você, meu amor, eu não sou ninguém
Ai, que saudade,
Que vontade de ver renascer nossa vida
Volta querida
Os meus braços precisam dos teus
Teus abraços precisam dos meus
Estou tão sozinho
Tenho os olhos cansados de olhar para o além
Vem ver a vida
Sem você, meu amor, eu não sou ninguém
jueves, 9 de abril de 2009
Laberinto
Perplejo ante los laberintos que hay dentro de mi
Evadirlos es en vano, escapar insuficiente.
En búsqueda de una solución
voy perdiendo la razón.
Busco en los cuerpos que viví
y en los sentimientos que huí.
El desencuentro me asombra, debilita, y deslumbra
quisiera al menos abstraerme.
Persuadirme con tu cuerpo, inconsciente de este engaño
No pensar (pensar qué).
Nada más me llena
nada más me lleva
que el camino hacia vos.
domingo, 22 de febrero de 2009
Melodía
Terminó el grado cero de la música
en el momento que tu armonía se presentó,
la melodía jamás pensada me la trajiste vos.
Pude sentirte como una nota grave vibrando muy lento
en el corazón,
pude interpretarte cuando irrumpiste mi silencio
para hacerte canción.
Pero no pude controlar el ritmo de mi pulsación.
Terminó el grado cero de la música
en el momento que tu armonía se presentó,
la melodía jamás pensada me la trajiste vos.
jueves, 29 de enero de 2009
La melodía desgarrada
Los momentos más importantes en la vida de una persona se presentan y desaparecen con una fluidez imperceptible a todo tipo de sentido. Así, de muy chico, fui testigo inconsciente de cómo llegaron a mis oídos unas canciones con las cuales podía sentirme identificado, acompañado y comprendido. Eran las canciones de Legiao urbana y vinieron a mí a través de un regalo: un viejo cassette; que como no podía ser de otra forma, me lo había grabado una de las compañeras más lindas del colegio.
Esas melodías desgarradas y profundas, causaron en mí una conmoción que sólo pueden ser comparadas con la fuerza de la voz grave que las acompañaba, sobre todo lo que ella decía y cómo lo decía. Esa voz pertenecía a Renato Russo.
Foto extraída del Libro: "Renato Russo de A a Z: as idéias do líder da Legiâo Urbana". Simone Assad (coord.). Ed. Letra Livre. Campo Grande - MS. 2000.
miércoles, 7 de enero de 2009
Rutina
Durante el viaje me sumerjo en la lectura, ésta no siempre logra saciar las ansias de revertir la vulgar jornada.
Entre mis libros hay sociólogos que anuncian “anomias” análogas a mi aislamiento (real, por más cacofónico que resulte a la primera lectura); hay filósofos que garantizan desdicha, fruto del desarrollo del conocimiento; hay historiadores que como en un drama, muestran a personajes excepcionales tapados por la cultura mediocre. Pareciera que todo texto hace referencia al drama existencial, mis ideas se identifican.
Llego a la oficina y noto la falta de sentido de pertenencia con cada una de las actividades que a diario realizo, vivo el aislamiento y siento la desdicha; tal como en los textos.
Al volver del trabajo, gozo de una sensación de libertad que generalmente, es acompañada por una secuencia musical similar a las cinematográficas. Mis lecturas tienden a la poesía. Mi alma se enriquece y mi mente se cultiva, saben que es la hora de componer, de escribir, de pensar, y de generar una vida que priorice a mis ideas.